#PedacitosdeHistoria. Hoy alguno de los barcos clásicos de los años 20 y 30.
- El Bon Temps, del año 1926. Diseñado y construido por Pere Nicolau Mandilego con 11,95 de eslora, 3,58 de manga y calado de 1,78. Se trata de un barco que se construyó en Manacor con las pautas de los barcos de pesca y transporte típicos por aquel entonces en Baleares. Un barco de aventuras y navegación. Su primer propietario, bisabuelo del propietario actual, lo mandó a construir para navegar de Barcelona a Mallorca. Durante la Guerra Civil permaneció atracado en Menorca después de ser frenado por un submarino republicano mientras navegaba para reunirse con su familia en Palma. Después residió en Santander donde fue restaurado. Finalmente, su por aquel entonces propietario: la Fundación Villas del Cantábrico, se lo vendió al biznieto de su primer armador, volviendo a la familia originalmente propietaria.
- Nuestro querido Gipsy, de 1927. Diseño de Colin Archer del tipo Queche Bermudiano construido en los astilleros de Echevarrieta y Larrinaga de 11,28m de eslora y 3,5 de manga. Numerosas historias que contar sobre esta casi centenaria goleta que hoy inspira a navegantes y es símbolo de compromiso con la navegación clásica.
- El Malabar X de 1930. Diseñado por John G. Alden y construido por Hodgdon Brothers, 18,10 de eslora, 4,38 de manga y calado 2,52. Fue el décimo barco de su diseñador, John Gale Alden. Según se dice, uno de los barcos más importantes de la historia del diseño naval de recreo. Participó en numerosas regatas, destacando la Bermuda Race que ganó en 1930 y en 1932. En esta última competición otras 5 embarcaciones diseñadas por Alden se clasificaron entre las 10 primeras posiciones. En 1991, el huracán Bob lo dejó destrozado al lanzarlo contra el muelle de amarre. Hoy, después de una meticulosa restauración, sigue navegando por aguas del Mediterráneo.
- El Raptus de 1932. Colin Archer Construido en 1932 en los astilleros noruegos de Christensen&Brdr Moen como barco pesquero, 10,47 de eslora, 4,05 de manga y 2,90 de calado. Trabajó en la pesca hasta los 60 cuando cambió de dueño y fue renombrado con su nombre actual. En los 70 lo adquirieron Rolf y Kari Thrane Steen y lo sometieron a un periodo de restauración y adaptación de su arbolada y sistema bélico. Por entonces, también fue aparejado en Ketch. Después de varios propietarios y participar en varias convocatorias de “Tall ships”, lo trasladan a las islas canarias donde es abandonado. En 2009 fue rescatado por su actual propietario quien lo traslada a Barcelona, donde lo devuelve a la vida.
- Información obtida de la web de la Flota Aebec.